En la noche,
cuando los enfermos terminales esperan despiertos,
escucho pasar al Carruaje de la Muerte;
Camina salvaje, por senderos oscuros,
cegando las luces a las que se aferra la vida.
Click-clack, click-clack, click-clack, click-clack,
los cascos pasan,mi hora todavía no llegó.
Caballos con piel de cuervo,tiran del carruaje.
Viajan lejos, a través de la lúgubre madrugada,
no descansarán hasta el alba.
Click-clack, click-clack, click-clack, click-clack.
La noche espanta,
el Carruaje de la Muerte sube hacia la colina.
Alguien tendrá que limpiar las lágrimas
de la mañana.
David Suárez "Suarón" a partir del poema en inglés "The Dead Coach" de Katharine Tynan Hinkson.
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