"Mientras que casi todos los varones que morían en la hoguera lo hacían por acusaciones de herejía o por ser homosexuales, todo aquel que fuera discreto en sus relaciones con otros hombres o no hablara más de la cuenta no tenía de qué preocuparse. Las mujeres sin embargo eran acusadas por las razones más absurdas, como por ejemplo el hecho de ser demasiado atractivas o demasiado feas o simplemente prostitutas, el que sus madres también hubieran muerto en la hoguera o tener un aspecto peculiar como por ejemplo una escoliosis aguda que las hiciera caminar jorobadas o tener los cabellos blancos a una edad prematura.
Normalmente se asociaba a la bruja con la apariencia de una anciana de aspecto desagradable, pero existía la creencia de la transformación, en base a la cual la bruja podía convertirse en una joven y deseable doncella con el objetivo de llevar a los hombres a la perdición.
Aunque había una serie de características esenciales que distinguían a una bruja tales como el hecho de volar, ya fuera en palos, sobre animales voladores, demonios o mediante ungüentos mágicos; participar en aquelarres; practicar sexo con demonios; realizar pactos con el diablo y hacer uso de la magia negra.En algunas poblaciones de Alemania consta en archivos históricos que la población femenina llegó casi a desaparecer."
La brujería a través de los siglos. Elena Puchalt
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