Te los encuentras hurgando en cualquier lado
el modo de robar lo que alcancen con sus manos
tratando, desde el marco legal despellejar al país
son carroñeros, cebados
políticamente van timando a la gente, legislando, bloquendo información
y sonrientes, muy pegados a curas y mafiosos, que mueven los hilos
que mueven las masas que les dan de comer y avión privado.
Son muy visibles, aman a su partido, pero se despedazan entre ellos
por tener ese puesto y un poder, declarado
declaran que trabajan en torno al interés de la gente
pero no tienen nada que rendirle al votante
dan teatro, escenas obscenas, improperiso, llamadas, chantajes
y pugilato.
Son tres disfraces: el partido de en medio
que reinó y sigue dando su latita en curules
ya sembraron es su tiempo el pavor, el rencor
el dolor, la palanca y el voto intercambado por tortas
por plumas, cachuchas
y el otro partido, el que ganó
es mucho, mucho peor,
buscan beneficiar a sus compinches de estirpe, pinches
piensan como caciques, y muerden y tragan,
son plaga que a prisa, se guardan botines, negocian entre ellos
antes de que muera su andar, del robo neoliberal
se devoran todo.
Neoliberales, corruptos, tragones con bulimia romana
tienen sus sanitarios y el otro partido, quesque dizque de izquierda
irrumpen, invaden, bloquean, proclaman y juegan
congregan, ofenden, pelean.
Dicen que representan esa voz popular, primida, mentira
son corridos de aquí, inconformes de allá,
solo buscan dinero y se reparten cuartitos oscuros
los fajos de billetes y los cheques
con muchos ceros.
Ni un voto a ellos.
Ni un voto a los tres partidos del poder.
Ni un voto a ellos, ni un voto a ellos.
Ni un voto.
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