29/9/09

El padre, la madre, el hijo, la hija. Jean Arp


El padre se ha colgado
en lugar del péndulo.
La madre es muda.
La hija es muda.
El hijo es mudo.
Los tres siguen
el tic tac del padre.

La madre es de aire.
El padre vuela a través de la madre.
El hijo es uno de los cuervos
de la plaza San Marcos en Venecia.
La hija es una paloma mensajera.

La hija es dulce.
El padre se come a la hija.
La madre corta al padre en dos
se come una mitad
y ofrece la otra al hijo.

El hijo es una coma.
La hija no tiene pies ni cabeza.
La madre es un huevo espoleado.
De la boca del padre
cuelgan colas de palabras.

El hijo es una pala rota.
El padre no tiene más remedio
que trabajar la tierra
con su larga lengua.
La madre sigue el ejemplo de Cristóbal Colón.
Camina sobre las manos desnudas
y atrapa con los pies desnudos
un huevo de aire tras otro.
La hija remienda el desgaste de un eco.
La madre es un cielo gris
por el que vuela bajo muy bajo
un padre de papel secante
cubierto de manchas de tinta.
El hijo es una nube.
Cuando llora, llueve.
La hija es una lágrima imberbe.

Jean Arp de "El velero en la foresta"

2 comentarios:

Santiago Bertault dijo...

Este tío debería ser mas conocido como poeta. Sus versos surrealistas son la ostia.

Saludos fiera!

David Suárez Suarón dijo...

Sí, destaca, según leí, también por el humor en sus poemas. Menudo crack que fue.